miércoles, mayo 18, 2005

ayeres.III.

odio las lluviesotas, como esta. sean de mi yucapatio, de salzburgo, de la habana. y las odio no tanto por ellas mismas sino por su inevitable acción de mojarme los zapatos. no tolero andar con los zapatos empapados. sean chanclas, tenis, botas. oooohhh! a esto le llamo yo: el gran miedo a resbalar... y caer... pero disfrazado, jeje.