domingo, febrero 20, 2005

la semana

quema por dentro esta tarde en la que cabe nada excepto làgrimas. una noche desierto, con estrellas infelices, esparcidas, embarradas sobre esa luna atiborrada de miradas. ni mùsica ni silencio suenan mejor. todo orillado a ser lo mismo, hasta explotar sabiendo que se escapa, se esconde la carcajada... por temer al gris. esto poco sè ahorita.